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2017… y sin presupuestos.

El mensaje conciliador de estas pasadas fiestas: amor, solidaridad y entendimiento; no ha surtido efecto en el gobierno de la Marea y seguimos sin presupuestos para el 2017 en la ciudad de A Coruña.

Tras meses de oportunidades para sentarse en la mesa con el resto de fuerzas políticas, poner en común los intereses de la ciudad y llegar a un acuerdo; el gobierno local no está dispuesto a ceder en sus presupuestos ideológicos, que colocan así por encima de las necesidades de la ciudadanía. Por ese motivo, asociaciones de ámbito comercial, vecinal, deportivo, cultural, sanitario, etc., se encuentran paralizadas y en una grave situación que les impide llevar a cabo muchas de sus actividades y proyectos, ya que no disponen de los fondos necesarios para este 2017, ni de la información pertinente para planificar y organizar su funcionamiento. La inoperancia del gobierno local está acabando con el tejido social y económico de la ciudad; no cabe duda de que son los propios coruñeses los más perjudicados.

Uno de los ejemplos más esclarecedores de su mala gestión es el gran fiasco de su ansiada renta social; con un presupuesto de 2,1 millones de euros, a las pocas semanas de entrar en vigor se han visto obligados a retirar 1,8 millones para otras áreas. Su falta de interes la estamos pagando todos; y, no cabe duda, están dejando atrás a esas mayorías sociales para las que dicen gobernar.

Además, año tras años se siguen posponiendo obras necesarias como la intermodal o la modernización de la avenida Alfonso Molina, principal vía de acceso a la ciudad que es portada recurrente de periódicos por las situaciones de colapso que en ella se producen. Y no se trata sólo de grandes proyectos, a menor escala, también los barrios sufren el abandono del gobierno de la Marea; algunos de nuestros mercados, puntos de interés socioeconómico, necesitan soluciones inmediatas para continuar su actividad con garantías.

El panorama coruñés no es, por tanto, muy alentador. Aunque se aprueben los presupuestos, la falta de interés, de experiencia y de humildad del equipo de la Marea, ya demostrada durante todo el año pasado, puede ocasionar la paralización de la ciudad, de su crecimiento tanto en lo social como en lo económico. Mi deseo es que este gobierno deje su proselitismo ideológico a un lado y se dedique a la gestión de nuestra ciudad. Ya que una ciudad moderna como A Coruña, no puede permitirse el lujo de estancarse durante los próximos años.

Miguel Ángel Rosende, Portavoz de Ciudadanos (C’s) A Coruña